New York se alquila: los básicos

New York se alquila, literalmente.

Nadie admite querer quedarse para siempre en esta ciudad. Pero todos pagan la renta por un periodo determinado. Para alquilar sus experiencias, sus oportunidades, sus momentos únicos. Hay tal diversidad que cuesta más trabajo elegir barrio que cliché Neoyorkino.

Quieres ser un hipster de Williamsburg? Pues sigue la inteligente línea antisistema y consigue dar esquinazo a las comisiones inmobiliarias. Eres un yuppie rollo wallstreet y no tienes tiempo ni de peinarte el tupé? déjate mimar por un agente inmobiliario y exprímelo al máximo siguiendo algunos simples consejos. Porque aquí todo se trata de exprimir, de sacar el máximo partido a lo que uno tiene y al cuerpo que Dios le ha dado. Ya vengas de viaje de negocios, te quedes unos añitos o solo unos meses.

Y para no dejarse ni una gota de nada, hay que saber en qué hay que invertir el tiempo. “The power of less” lo llaman. De less perder el tiempo en trámites

innecesarios, de less veces que no puedo conseguir el apartamento que quiero porque me he olvidado un papel, de less no me estoy enterando de qué habla este agente inmobiliario; que dice que tiene un piso “pre-war” precioso…  pues a mi eso de “antes de la guerra” me suena a viejuno.

Por eso te ponemos las pilas y te dejamos una batería de artículos que te ayuden a que tus primeros pasos al alquilar apartamento en Nueva York sean más bien un baile de chá chá chá.

Con todo el lenguaje secreto de los apartamentos  que te permita hablar el mismo idioma que neoyorquinos de toda la vida. Y comprender y comparar lofts, rascacielos y walkups por igual. Y si decidieses romper con lo convencional y quedarte a vivir en Nueva York, tengas claro si prefieres ahorrarte impuestos y meterte en una Co-op o ahorrar debate con la junta de vecinos y meterte en un Condominio. En resumen, te contamos todo lo que hay que saber para que encontrar casa no sea una pesadilla sino una siestecita de verano.